...Un dilema es cuando tienes tan buenas razones para hacer algo como para no hacerlo. Cuando tienes un dilema, ya no se trata de qué quieres elegir, sino de qué prefieres perder. ¿Qué perder? Eso es un dilema. Definir cuál es la pérdida más soportable.


And when you smile the whole world stops and stares for a while

El tren avanzaba sin cesar. Ella, sentada junto a la ventana, no dejaba de mirar al exterior. El paisaje se difuminaba a causa de la velocidad, pero no le importaba no poder observarlo detenidamente. A cada metro que avanzaba ese tren, más cerca estaba de sus abrazos.
Habían pasado ya dos años, dos años que le habían parecido dos siglos. Pero al fin estaba de vuelta, volvía a casa, volvía a verle.
Miró su reloj, faltaban cinco minutos para llegar. Le parecía increíble que esa eterna espera de 730 larguísimos días empezara a resumirse en cinco minutos para saltar a sus brazos.
Por fin logró ver la estación a lo lejos. El corazón le dio un vuelco y la sonrisa que se le dibujó en la cara no era siquiera imaginable. Sólo dos minutos.
El tren ya se adentraba en la estación, no había parado aún cuando le vio. De pie en el andén con una sonrisa tan indescriptible como la suya.
Se levantó de su asiento apresuradamente y salió disparada hacia la salida. Aún tuvo que esperar unos segundos a que el tren se detuviera del todo y poder bajar. 
Y por fin se detuvo. Abrieron la puerta y ella salió corriendo, soltó las maletas en mitad del andén y le abrazó sin más. Él correspondió a su abrazo y le susurró al oído un te quiero, de esos que ella ya creía olvidados por completo.